La acptitud ante la Vida es fundamental para todo. Para comer también.
Cuando te estas comiendo un chuletón impresionante, jugoso, rojo por dentro, con un sabor excelente no puedes estar pensando al mismo tiempo que te va a subir el acido úrico o el colesterol. Esa no es la actitud inteligente. Eso es comer con culpa, con miedo. Así, con esa actitud, hasta un inocente trozo de pan te puede provocar una subida de tensión.
No hay cosa mas dañina que las creencias. Creer que esto me va a hacer daño o aquello me va a sentar mal es lo peor que nos podemos hacer a nosotros mismos. Nuestra mente es poderosa. Es capaz de todo. Si pensamos que nos sentará mal tener por seguro que así será.
Pero hay remedio para esto y para todo. Cambiar de actitud. Agradecer. Comer y disfrutar de cada bocado, de cada sensación, del placer que produce degustar esa carne tan jugosa, tan sabrosa. Del buen vino, de la buena compañía, de ese estado mental de agradecimiento a la Vida por las cosa tan maravillosas que nos ofrece. Eso, de verdad amigos, es dieta saludable. Puedes comer de todo lo que quieras. Todo te sentara bien y no te tendrás que preocupar por tu salud. Sera perfecta.
Si tienes algún problema de salud actualmente, antes de observar lo que comes, mira a ver como piensas. Que miedo llevas contigo. Que culpa te atribuyes.
Eso si que es dañino y perjudicial. Hay esta la raíz de todas las enfermedades. No está en lo que entra por tu boca. Está en lo que sale de tu mente, de tu actitud.
Lo mismo que crees que un medicameto te puede curar puedes también creer que este» cocido madrileño» te va a sentar de maravilla. Los efectos son iguales solo depende de tu actitud.
Comer, disfrutar, agradecer, Ser felices. Para eso estamos aquí.
Un abrazo.
Justo Martín-Caro